Tras años de investigación, los expertos han determinado que existe una relación entre la fibromialgia y el síndrome de colon irritable, pero no se comprende todavía por qué.
Trastornos funcionales
Solo una pequeña cantidad de personas en España padecen fibromialgia, pero para las personas con síndrome de colon irritable es mucho más común. Más de la mitad de los pacientes con este síndrome también tienen síntomas de fibromialgia.
En general, es probable que coexistan durante años, y se manifiesten al mismo tiempo o en momentos diferentes.
El síndrome de colon irritable y la fibromialgia se clasifican dentro de una amplia categoría denominada trastornos funcionales. Decimos que alguien padece un trastorno funcional cuando su cuerpo no está funcionando como debería, pero los médicos son incapaces de diagnosticar la causa u origen.
El dolor del síndrome de colon irritable se localiza en los órganos internos. Si padeces fibromialgia, el dolor se manifiesta de otra manera, en la piel y el tejido profundo. Aunque la fuente del malestar proviene de diferentes lugares, los investigadores y los médicos creen que sus causas están relacionadas. Muchos expertos en dolor creen que se trata de un único trastorno crónico que provoca dolor en diferentes lugares a lo largo del tiempo.
¿Cómo se relacionan?
Con ambas enfermedades, se tiene una mayor actividad cerebral en las partes que procesan el dolor, cosa que puede amplificar la sensación de dolor.
El problema exacto no se comprende bien, pero en estos trastornos funcionales, el sistema nervioso está demasiado sensible o hiperactivo. Se cree que el sistema inmunológico desempeña un papel, igual que la genética.
El estrés puede conducir a cualquiera de estos trastornos funcionales. Además, más de la mitad de los pacientes con fibromialgia reportan síntomas de trastorno de estrés postraumático, una afección que afecta al cerebro.
Los últimos estudios apuntan a un aumento en los niveles de histamina en el torrente sanguíneo como causa de este tipo de enfermedades.
¿Qué podemos hacer?
Es necesario que hables con tu médico sobre medicamentos recetados que podrían ayudarte.
Trata los síntomas físicos y mentales por igual. Aprende todo lo que puedas sobre estos trastornos, ya que cuanto más sepas sobre tu condición, mejor podrás cuidarte.
El ejercicio te ayudará, especialmente el cardio. Aumenta la frecuencia cardíaca y la fuerza muscular, pero empieza despacio. También puedes probar yoga o tai chi. La meditación también puede calmar la mente y el cuerpo.
Desde la Clínica de la Dra. Carmen Sánchez te recomendamos que mantengas una mentalidad abierta para probar todos los tratamientos que te sugiera el médico, ya que a menudo los tratamientos tradicionales como los medicamentos o la cirugía pueden no ayudar.